Cuando la comunicación se encuentra severamente afectada y limita o imposibilita los intercambios comunicativos de la persona con su entorno, el logopeda valora e introduce un sistema alternativo y /o aumentativo de comunicación adaptado a cada persona que cubra las necesidades comunicativas permitiéndole su participación en diferentes contextos. El objetivo es proporcionar un medio con el que se pueda comunicar de forma eficaz favoreciendo todas aquellas situaciones de interacción social, estableciendo puentes para la comunicación interpersonal cuando ésta no es posible de forma natural, de tal forma que se propicie la expresión de sus intenciones comunicativas para, de esta forma, poder influir sobre su entorno y participar de forma activa en la sociedad.